Estafas inmobiliarias más habituales a la hora de arrendar una vivienda
Las estafas inmobiliarias son cada vez más comunes y no dejan el negocio del arrendamiento por fuera. Hay cada vez más posibilidades de caer en una de las trampas de los antisociales que abusan de la necesidad, como el techo, para cometer delitos, pudiendo convertir su búsqueda en un cuento de terror.
A esta situación se le suma las facilidades que puede encontrarse en el internet, un medio que hace muy difícil rastrear a estos delincuentes que encuentran víctimas cada vez con más frecuencia. Es muy fácil caer en tentaciones que pudieran parecer inocentes, tales como las que a continuación se plantean.
Estafas más frecuentes
Arrendatario ausente: es el modo más común de estafa. El supuesto arrendatario manifiesta indisposición a la hora de mostrarle la casa o el apartamento, como estar enfermo, muy ocupado o vivir lejos del lugar donde está enclavado el inmueble, que suele ser muy llamativo, casi irresistible, a un precio que parece de mentira; y lo es.
Dinero por adelantado: los estafadores tienden a pedir dinero a modo de depósito por adelantado, incluso antes de concretar la reunión para que conozca el sitio de alquiler o antes de firmar un contrato de arrendamiento.
Subarriendo sin que sea permitido: otra de las formas más comunes de timo es la que cometen algunos arrendatarios al subarrendar el inmueble sin que el dueño del apartamento o casa lo sepan con la intención de lucrarse con una propiedad que no es suya. Por lo general, estas personas piden dejar de lado el contrato de arrendamiento para evitar verse comprometidos legalmente.
Solicitud de concretar el trámite fuera de las plataformas web habituales de arrendamiento: el estafador suele encontrar un modo de dejar el contacto personal con el o los interesados.
Consejos para evitar caer en las manos de un estafador
Una vez conocidas las estafas más frecuentes, se ofrecen consejos para no verse metido en una situación como esta. Encienda las alarmas si:
Encuentra ofertas más que increíbles: puede que encuentre anuncios de arrendamiento con varios cientos de miles de pesos por debajo de otras ofertas en la zona donde está ubicado el inmueble.
Lenguaje poco natural: si se comunicó con una oferta que ya le hace ruido y encuentra extraña la voz del supuesto arrendador, puede que esté usando una herramienta de voz computarizada.
Dinero: nunca pague más de lo mínimo establecido por la ley por el depósito o la fianza. Incluso, puede pagar el mínimo exigido y el resto una vez compruebe que todo es correcto.
Datos de la cuenta bancaria: verifique que los datos del arrendador sean los mismos que el del titular de la cuenta bancaria donde debería transferir el dinero.
Pida documentos de identificación: usted está en su derecho de desconfiar.
Consejos para las víctimas
Si ya no hay remedio porque es víctima de un estafador, lo primero que debe hacer es reunir todas las conversaciones que ha tenido con el sospechoso, podrían servirle para denunciar el hecho ante la policía. Las autoridades pueden ayudarle a encontrar al estafador y, con mucha posibilidad, a recuperar el dinero.
El siguiente paso es comunicarse con el portal web o periódico donde encontró el anuncio para que estén al tanto del hecho. Evite que el supuesto ladrón siga delinquiendo.