Arquitectura bioclimática: diseño inteligente y ecoamigable para su hogar
Una vivienda con espacios naturales que se adapta a las condiciones climáticas del entorno, mientras reduce el gasto de energía eléctrica, es la premisa de la arquitectura bioclimática que está revolucionando la construcción de las casas y edificaciones actualmente.
¿Qué es la arquitectura bioclimática?
La arquitectura bioclimática es el nuevo enfoque del diseño y la construcción de las casas modernas, que busca aprovechar de manera inteligente los recursos disponibles, como la luz natural, el tipo de suelo, la vegetación, las fuentes de agua, así como las condiciones climáticas y los materiales que sean susceptibles de reutilizar.
Con esto se consigue reducir el impacto en el medio ambiente y el uso de energía natural, disminuyendo hasta en un 10% el costo de la factura de este servicio, en contraste con una casa construida de manera convencional.
En Colombia, los pisos térmicos ofrecen un amplio abanico de posibilidades en la construcción de casas ecológicas, que incluso, ya se está realizando en hoteles campestres, así como en viviendas de interés social. Un ejemplo de arquitectura bioclimática sostenible y sustentable lo podemos encontrar en el Hotel Cannúa ubicado en Marinilla, municipio de Antioquia (Colombia).
Para la construcción de este hospedaje, se utilizaron bloques de tierra comprimida en la estructura, agua de lluvia y residuales tratadas y reutilizadas. Además, el menú se elabora a partir de la cosecha de productos orgánicos, cultivados alrededor de la propiedad, que ofrece una experiencia gastronómica única.
Características de la arquitectura bioclimática
Los principios bioclimáticos de este tipo de urbanismo sostenible integra el entorno natural con las innovaciones tecnológicas para ofrecer confort y economía a las viviendas. Las características de la arquitectura bioclimática se observan en:
Orientación y distribución para aprovechar la luz del día
El comienzo de un diseño sostenible bioclimático, comienza con la ubicación y orientación, es decir, que se examina la forma más eficiente de aprovechar la luz solar, y así, mantener una temperatura agradable al interior de los inmuebles.
Por otra parte, las construcciones modulares, durables y flexibles practicadas por la arquitectura bioclimática consiguen aprovechar mejor los espacios. La ubicación estratégica de las ventanas, los paneles solares o el uso de materiales capturan la luz solar para convertirla en fuente de calor.
Aislamiento térmico acorde al clima
El aislamiento térmico con elementos naturales como el corcho, el cáñamo, la fibra de coco y la madera, son clave para reducir la pérdida de calor en temporadas de frío o lluvias y evita el calentamiento excesivo en temporadas de sequía, lo que permite mantener una temperatura constante dentro de la vivienda durante todo el año.
Convivencia armoniosa con la naturaleza
Otro elemento importante en la arquitectura bioclimática es la creación de sombra, la cual se consigue mediante el uso de aleros y persianas que previenen el sobrecalentamiento durante periodos de altas temperaturas.
En Colombia, su aplicación es muy conveniente durante la estación seca (diciembre a enero y de julio a agosto). Aunque no podemos olvidarnos de las plantas, quienes cumplen esta función y, además, funcionan como un aislante acústico natural.
Ventajas de la arquitectura bioclimática sostenible
Los beneficios de la arquitectura sostenible se ven reflejados en una mejor calidad de vida y el uso consciente de los recursos naturales. Además de:
Sostenibilidad ambiental
La reducción del consumo energético en el diseño sostenible de casas o edificios contribuye a disminuir la huella de carbono. Este índice ambiental, por lo general, se ve afectado en gran medida por la industria petrolera y de transporte.
Un colombiano promedio puede generar cerca de cuatro toneladas de CO₂ al año. Así que, cualquier medida que se tome al respecto para reducir la huella de carga, es un aporte a la calidad de vida y al cuidado de la biodiversidad del planeta.
Reducción de costos
Al minimizar el uso de electrodomésticos, se reduce el uso de energía eléctrica que, como mencionamos, es uno de los principales productores de huella de carbono. Lo que, en consecuencia, reduce el impacto en el medio ambiente, promueve la incorporación de tecnologías de energía renovable y disminuye el costo de la factura de energía.
Mejora el confort
Al seguir los principios de la arquitectura bioclimática, en la construcción de viviendas sostenibles, existe el concepto de “estudio de confort”, en el que se evalúan las necesidades de las personas que ocuparán las casas o edificios. Esto en pro de lograr que ellos se sientan cómodos y a gusto durante cualquier época del año.
Factores como la temperatura, la velocidad del aire, la humedad, entre otros, hacen parte de los modelos de confort usados para dicho fin.
Uso eficiente de los recursos
La principal premisa de la arquitectura bioclimática radica en el uso eficiente de los recursos naturales y de las condiciones climáticas cambiantes para mejorar la calidad de vida de las personas, al proporcionar ambientes con ventilación natural, iluminación adecuada y reducida contaminación acústica y del aire.
¿Cómo aplicar la arquitectura bioclimática?
La arquitectura bioclimática se integra de manera armónica con el entorno y las condiciones climáticas propias del lugar, es decir, que aprovecha al máximo las fuentes ambientales circundantes para ofrecer construcciones que fomentan la innovación y la creatividad.
Algunos ejemplos de su aplicación los encontramos en:
- Reutilización de aguas lluvias, mediante un sistema de filtrado.
- Usar enredaderas, árboles, tejados verdes, entre otros, para reducir el calor y mantener un clima fresco al interior de los inmuebles.
- Crear algunas fugas en la casa para mantener la estanqueidad.
- Cultivar los propios alimentos, de forma que sea un recurso sustentable.
- Ubicar las ventanas mirando hacia el Ecuador, aprovechando la energía pasiva.
Tendencias actuales en la arquitectura bioclimática
La arquitectura bioclimática sustentable se mantiene en constante evolución y aprovecha las innovaciones tecnológicas para abordar nuevos desafíos. Las tendencias que están de moda en este tipo de construcciones son:
Diseño Passivhaus
Esta tendencia se origina en Alemania y tiene como objetivo la construcción de ambientes con uso eficiente de la energía. Su diseño intenta minimizar la pérdida de calor y mantener una temperatura agradable al interior de la vivienda.
En Colombia, ciudades como Bogotá, Medellín, Valledupar, Barranquilla, Santa Marta, Cali y Armenia ya se encuentran a la vanguardia en este tipo de estilo. Apartamentos rodeados de naturaleza, el manejo eficiente de las basuras, bajo consumo de energía y excelente ventilación natural, son algunas de las características más notables.
Integración de energías renovables
La combinación de tecnologías que aprovechan la energía solar, eólica o geotérmica en el diseño arquitectónico es otra tendencia que va en aumento, gracias a su notable contribución en la reducción de las emisiones de carbono.
Edificios inteligentes
La incorporación de sistemas de automatización y control en edificios, conocidos como “edificios inteligentes”, permiten una gestión más eficiente de los recursos energéticos. Esto se logra mediante la utilización de sensores y conectividad, que facilitan la adaptación del edificio a las condiciones climáticas cambiantes y a las necesidades propias de los usuarios que habitarán el lugar.
Materiales sostenibles
El uso de materiales de construcción sostenibles y reciclables son una parte fundamental en la arquitectura bioclimática. Veamos algunos ejemplos. La madera, ya sea en pisos, paredes o techos, funciona como un aislante térmico y acústico natural. Los jardines verticales, propios de los “edificios verdes” , bloquean la radiación y reducen el ruido exterior.
También tenemos los bloques de tierra comprimida, también conocidos como BTC o CEB, elaborados a partir de tierra, arena y arcilla, hacen parte de la innovación en construcción sostenible.
Diseño de espacios verdes
La incorporación de cubiertas verdes a base de plantas de raíces bajas colocadas de forma vertical sobre espacios impermeabilizados que funciona como un mecanismo de recolección de agua lluvia. Con lo que se logra mantener hidratados los jardines, purificar el aire y regular la temperatura, además, de dar una mejor estética al edificio.
La arquitectura bioclimática es la respuesta inteligente y sostenible a los desafíos ambientales y energéticos que buscan hacer frente al cambio climático. Las principales ciudades de Colombia ya están aprovechando estas técnicas de construcción de viviendas autosostenibles para mejorar la calidad de vida, mediante el aprovechamiento inteligente de los recursos naturales.
Preguntas frecuentes sobre la arquitectura bioclimática o arquitectura sustentable
Una fachada bioclimática es aquella que promueve una ventilación controlada del aire que ingresa a la vivienda gracias a aberturas ubicadas estratégicamente. De esta forma, se logra mantener una temperatura agradable al interior de las casas.
Existen factores que influyen en el costo de una vivienda desarrollada con arquitectura bioclimática. Por ejemplo, la utilización de materiales amigables con el medio ambiente, tamaño del inmueble a construir, ubicación, maquinaria especializada, tipo de vivienda sostenible, por nombrar los más importantes.
Un proyecto de construcción de viviendas bioclimáticas para familias en condiciones extremas, realizado por el grupo de investigación en Georecursos, Minería y Medio Ambiente (Gemma), arrojó que el metro cuadrado de una unidad de vivienda de este tipo costó $892.000 pesos COP, frente a $1.2 millones de una casa tradicional.
Para el caso de las viviendas bioclimáticas de estratos más altos, el precio puede ser de $6 millones de pesos COP, por metro cuadrado. Este valor puede ser considerado alto, sin embargo, la inversión se verá reflejado en la durabilidad de la construcción, la protección del medio ambiente, el aprovechamiento inteligente de las condiciones climáticas y así como en la reducción en el uso de energía eléctrica y agentes contaminantes.