Si usted es una persona de la tercera edad y se encuentra reduciendo el tamaño de su casa o apartamento unifamiliar mientras se acerca la jubilación, existen algunas maneras en las que podría optimizar su situación actual de arriendo para obtener una mayor estabilidad en su presupuesto general.
A continuación le presentamos algunos consejos financieros simples para que los adultos mayores puedan vivir de forma más cómoda su vejez.
Consiga un compañero de cuarto
Con el aumento de las tasas de alquiler, particularmente en los centros urbanos más deseables, un adulto mayor puede darse el lujo de disfrutar la experiencia de vivir en una buena zona si comparte los gastos del apartamento con otra persona.
Tener un compañero de cuarto permite aligerar el peso de tener que pagar todos los gastos de un hogar arrendado por sí solo.
Deshágase del auto
Haga los cálculos pertinentes y descubra si eliminar el gasto de los pagos del automóvil, la gasolina, el mantenimiento e incluso el estacionamiento. Esto podría funcionar a su favor si encuentra la comunidad adecuada para sus necesidades donde tenga todas las comodidades como supermercados, centros comerciales, consultorios médicos, parques recreacionales, etc.
Menos es más
Mudarse de una casa grande a una más pequeña puede ser liberador en cuanto a temas de espacio, tiempo y dinero. También puede deshacerse de algunos muebles antiguos o adornos que ya no use.
La reducción de artículos permitirá el aprovechamiento óptimo del espacio. Además podrá tener un flujo de efectivo que serviría para adquirir otras piezas clave para su nuevo espacio.