Arrendar un apartamento es una tarea que puede complicarse y terminar en un resultado no tan positivo. Por eso es importante planificar el proceso e incluso documentarse muy bien antes de formalizar cualquier contrato.
Por lo general, las personas interesadas en arrendar, tienen una idea preconcebida de cómo quieren que sea el lugar donde vivirán; pero, además conocen su presupuesto y saben a ciencia cierta qué precio pueden pagar en realidad sin que afecte las finanzas.
Sin embargo, suele ocurrir que no se toman en cuenta aspectos pequeños, pero de gran relevancia. Por eso resulta vital iniciar una investigación exhaustiva antes de tomar la decisión de arrendar en un lugar específico y tener en claro ciertas circunstancias. Pero nada de eso se logrará si antes no se sabe lo que se quiere.
El plan previo al acuerdo debe partir de establecer prioridades, es preciso que la persona interesada en arrendar sepa qué quiere, cómo lo quiere y cuánto está dispuesto a pagar por ello. De esa manera no divagará mucho tiempo, el enfoque, en todos los casos donde se aplique, es positivo.
En la lista de prioridades se suelen detallar temas como:
- Espacio del apartamento a arrendar
- Ubicación de la vivienda (si está cerca del trabajo o la universidad mejor)
- Seguridad (es una zona para llegar a altas horas de la noche)
- Entorno (ojalá ubicado en donde haya zonas verdes, o posibilidades de comercio o ambas)
La idea es que esta lista sea personalizada, es decir, colocar en ella los ítems que son prioritarios para quien busca el alquiler.
Análisis de la figura jurídica
Este es otro punto que suele pasarse por alto. Un error grave, antes de entablar cualquier tipo de relación de negocios es no tener las condiciones claras. De esa manera, todas las partes involucradas saldrán beneficiadas.
¿Qué se debe saber en un contrario de arrendamiento?
- Condiciones básicas del uso de la vivienda
- Monto que se cancelará con la forma de pago incluida
- Tiempo por el que se realizará el contrato
- Deberes y derechos tanto del arrendador como del arrendatario
Comodidades extra
Se trata de un punto prioritario, las comodidades extra son aquellos beneficios que se obtendrán al arrendar, fuera de lo establecido en el acuerdo inicial. Muchas veces no las garantiza el dueño del apartamento o responsable del contrato, de hecho, tiene más que ver con otros aspectos, tales como:
- Tipo de transporte al que se tiene acceso en la zona
- Lugares de recreación que estén cerca del lugar
- Espacios para entrenamientos (para quienes acostumbran a ejercitarse)
- Áreas para el paseo de mascotas
- Seguridad de la zona
Presupuesto
Este es otra característica vital, porque se trata de la capacidad del arrendatario para cumplir con sus responsabilidades. En este sentido, tener una idea clara con respecto a la cantidad de dinero que se posee para cancelar el alquiler, es beneficioso porque de ahí se generarán todas las condiciones o exigencias de quien alquile el inmueble. Por ello, establecer una relación entre el costo y los beneficios, es una noción que no solo aplica en el mundo empresarial, también cabe a la perfección en este rubro.
Cambios y redecoración
Los cambios permitidos y procesos de redecoración quedan establecidos en el contrato de arriendo, pero pensar en ellos antes de firmar un contrato es ideal, porque así el interesado tendrá una idea de cómo puede adaptar el sitio a su gusto.
Mientras más alternativas de adaptación existan, mayor confort logrará quien vaya a arrendar el inmueble y eso es muy importante, porque sentirse a gusto en el lugar donde se vive, es el primer paso hacia la tranquilidad.
No siempre se pueden lograr todos los objetivos, esa es una realidad a tener en cuenta. Por ello, establecer un equilibrio entre lo que se desea y las posibilidades de lograrlo, resulta importante desde todo punto de vista.