Para los dueños de mascotas, ellas son parte de la familia, a la hora de mudarse a un nuevo hogar es posible que puedan extrañar su antiguo hogar. Los animales son inteligentes y ver que los dueños pasen menos tiempo con ellos y los vean moviendo cajas, les indica que algo está sucediendo.
Además para las personas que se estén mudando con una mascota puede ser complicado. Estos se tendrán que acostumbrar a un nuevo hogar y hacer todo el proceso de mudanza con la mascota.
Ambientar el nuevo hogar
El sentido del olfato de los perros es mucho más agudo que el de las personas por esa razón, al moverlos a una nueva casa se sentirán en un sitio desconocido. Un buen consejo es que los dueños evitan este problema es rociar un aroma por toda la casa 3 semanas antes de mudarse.
Antes que la mascota llegue a su nuevo hogar, el dueño tendrá que rociar ese mismo olor en toda la casa. De esta forma la mascota se sentirá en un ambiente conocido y no perderá la calma.
Inspeccionar el nuevo hogar
En el caso de los perros que suelen ser muy juguetones y acostumbran a correr y a meter las narices en todas partes, el dueño tiene que hacer una inspección en el nuevo hogar antes de llevarlo, porque puede haber criaturas venenosas, trampas, o cualquier otra amenaza para el perro. Una vez que el dueño haya hecho una inspección cuidadosa y elimine los posibles daños para su mascota, ya podrá llevarlo a su nuevo hogar.
Acostumbrarlos a las cajas
Los perros al ver que los dueños pasan menos tiempo con ellos, y ven la cantidad de cajas, además de verlo acomodando cosas. La mascota puede asociarlo a que el dueño se irá y lo abandonara en la casa, debido a eso este puede deprimirse o hasta ponerse agresivo.
Por lo anterior, es necesario que el dueño lo entrene y le haga entender que es un proceso necesario, y que no lo abandonará. Por esa razón es recomendable que pase tiempo con su mascota para que este se sienta tranquila.