Cuando llega el momento de independizarse o mudarse de ciudad (o incluso de país) cada vez son más las personas que deciden hacerlo con un roomie (o compañero de piso). Esto trae consigo ventajas: compañía, compartir gastos, dividir tareas, entre otras cosas. Sin embargo, para que las cosas se den de una forma agradable es necesario seguir ciertas normas para una buena convivencia.
Consejos para lograr una buena convivencia
1. Compartir las tareas
Limpiar, barrer, lavar, cocinar, todos estos quehaceres deben hacerse asignándose las tareas y cumpliendo cuando se debe. Para este trabajo puede funcionar muy bien un tablero con las tareas escritas y el responsable (por semana, mes, como prefieran), de esta manera todo será mucho más claro.
2. Franqueza con los gastos
Desde el primer día en que se comienza a vivir con uno o varios roomies es importante dejar en claro cómo se dividirán los pagos mensuales, ello incluye: servicios públicos (internet, agua, gas, aseo, luz, etc.), la renta y otros gastos de la casa o apartamento. Lo recomendable es dividirlo en partes iguales entre los compañeros de piso, pero cada grupo de roomies se organiza como mejor prefiera.
3. Normas del hogar
La base de toda convivencia es dividirse las tareas y cumplirlas, evitando afectar la estabilidad y tranquilidad del o los compañeros. Hay que tomar en cuenta que cada persona tiene hábitos y costumbres diferentes, es por esto que se deben fijar con tiempo las reglas que requieran. Por ejemplo: apagar las luces, avisar con tiempo si se tendrá una visita, no tomar las cosas del otro sin permiso, entre otras.
4. El respeto como premisa
No importa que tan cercana sea la relación con el roomie, toda relación se basa siempre en el respeto y en ello se encuentra entender y tomar límites con respecto a la privacidad. No agarre nada sin permiso, toque la puerta antes de entrar en su habitación o evite comentarios fuera de lugar.
5. El amor y la comida se dan la mano
Si comparten y dividen preparar las comidas, es importante que siempre cocine colocando amor en ello. Sin importar si es muy bueno en la cocina o no, es bueno que el cariño se sienta en cada bocado.
6. Analice bien con quien compartirá el espacio personal
Si aún está buscando un roomie, es fundamental que conozca todo lo que pueda antes de mudarse juntos. Si es posible consiga una reunión previa para que pueda evaluarlo mejor. Recuerde que al final del día será quien lo verá en la forma más personal.
7. Comunicación permanente.
Es normal que no todo sea color de rosas. Habrá cosas que molesten del roomie, así que es importante que siempre busquen espacios para el dialogo de una manera tranquila y respetuosa, siempre en pro de conseguir soluciones para la sana convivencia.
8. Si se va a mudar, avise
Si alguno se va a mudar, lo mejor es que lo haga con un mes de anticipación, de esta manera es más fácil conseguir otro roomie que cumpla con las características necesarias y de esta manera no afecte el pago del arriendo
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