Por lo general las personas mantienen ciertos tipos de costumbres, hábitos y rutinas que en muchas ocasiones pueden parecer interesantes, pero, en otras, incomodar lo suficiente como para desplazar a las personas fácilmente. Conocer desde un principio el comportamiento de los individuos que rodean el entorno donde más se frecuenta estar es tan importante como ingerir alimentos diariamente, ya que, al fin de cuentas serán personas con quienes se socializarán en la cotidianidad.
Ahora bien, darle la oportunidad de vivir a una persona desconocida o sin tanta información sobre la misma en una propiedad a veces puede parecer muy difícil de solo pensarlo. Sin embargo, existen diversas soluciones que ayudarán tanto al arrendador como al arrendatario a llevar y mantener una relación responsable, estrecha y sin problemas por los cuales preocuparse.
6 consejos para seleccionar al arrendatario perfecto.
Siempre acompañado de la ley
Este punto es uno de los más importantes a la hora de seleccionar a un arrendatario perfecto. Puesto que, ayudará a llevar legalmente todos los requisitos y documentos burocráticos que se requieren. Es responsabilidad de los propietarios dar un trato igualitario a todos los inquilinos.
Darle importancia al crédito que posea el inquilino.
El buen manejo del dinero y la responsabilidad de pagar las deudas en el tiempo preciso e indicado, es otro aspecto que no puede faltar dentro de la selección del arrendatario perfecto. Una de las cualidades que las personas deben tener es ser puntual con los pagos mensuales a las que se compromete. Por lo tanto, es recomendable verificar qué tan responsables son a la hora de cancelar sus pagos, ya que, esto será un indicio clave para que paguen el alquiler en el momento acordado.
Verifique que el arrendatario no tenga antecedentes penales
Muchas personas evitan este aspecto puesto que el procedimiento legal puede llegar ser un tanto tedioso. Sin embargo, es recomendable visualizar si la persona posee información criminal o algún delito que haya cometido para saber a qué atenerse. Solo se necesita el nombre y la fecha de nacimiento del arrendatario para obtener la información deseada.
Pregunte y observe sobre el historial de alquiler del arrendatario
Es bueno saber cuál ha sido el comportamiento del inquilino en otros lugares donde ya había alquilado, puesto que, a partir de allí se podría determinar si la persona es o no de buenas costumbres y responsabilidades. Por lo que se recomienda cuestionar:
- Responsabilidad de pagos en el tiempo indicado
- Motivo de mudanza
- Antelación de la mudanza
- Cuidados de la propiedad
- Valores expresados (responsabilidad, respeto, carisma entre otros)
- Quejas continuas
Verificar la estabilidad del inquilino
La movilidad del inquilino puede afectar al arrendador fácilmente. Es decir, si el arrendatario suele mudarse de forma continua por agentes externos como el trabajo, universidad, entre otras cosas, es muy probable que el patrón siga ocurriendo. Y lo que menos se quiere es pasar varias veces por la selección de la búsqueda del inquilino perfecto.
Pocas personas por habitación
La idea principal es que la vivienda se mantenga en buenas condiciones y que la convivencia dentro del hogar perdure, por eso, es recomendable que entre menos personas habitando un mismo lugar, mejor.
Nunca deje a un lado sus instintos
El sexto sentido que todas las personas poseen es importante seguirlo y no ignorarlo. En muchas ocasiones las personas presentan todos los papeles e indicaciones exactas, pero hay algo que no termina de generar esa confianza que se necesita para dar el aval. Simplemente debe proporcionar importancia a su evaluación y sentir.
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