Actualmente, los compañeros de residencia son populares, ya sean extraños o amigos. Para muchos, vivir con un amigo podría ser siempre parecer la mejor opción para arrendar, pero esto no siempre suele ser así, por lo que la opción de arrendar con un extraño siempre está disponible.
Ventajas de vivir con amigos
Puede parecerle más seguro
Elegir vivir con un amigo puede parecer menos arriesgado que compartir un apartamento con un desconocido. Durante el proceso de selección de compañeros de piso, puede ahorrar algo de tiempo y obviar muchas preguntas básicas porque ya conoce a su potencial compañero de piso.
Además de ello, puede ser más incómodo abordar sus preocupaciones y/o problemas con un desconocido que con un amigo, por lo que, si opta vivir con un amigo en el que confíe, se sentirá más feliz y seguro.
Mayor flexibilidad
Si decide vivir con un amigo, puede tener unas fechas de entrada y salida más flexibles. Un amigo puede ser más comprensivo que un desconocido si sabe que usted se encuentra ocupado debido a su horario de trabajo o a ciertas circunstancias de la vida.
Tendrá una vida social más sencilla
Puede ser estupendo vivir con un amigo en lugar de con un desconocido porque ya hay una relación interpersonal establecida que va más allá de ser compañeros de arriendo.
Cuando quiera salir con un amigo, tenerlo como compañero de piso puede ahorrarle algo de tiempo, ya que compartirán el mismo espacio vital, sin tener que salir, enviar mensajes de texto o llamar a alguien. Además de que también es probable que frecuente con los amigos de su compañero, y su compañero con los suyos.
Contras de vivir con un amigo
Los amigos no siempre son los mejores compañeros de arriendo
Vivir con un buen amigo no siempre es la mejor idea, debido a que este puede ser un mal compañero de piso por distintas razones. Puede que su amigo no limpie tan a menudo como usted lo hace, o que no pague las facturas con regularidad. También puede pasar que su amigo no pague el alquiler.
Por ello, aunque considere que su amigo sería un buen compañero de piso, un desconocido podría serlo mejor. Un desconocido podría sentirse apenado o menos cómodo con el hecho de dejar su apartamento desordenado o dejando de pagar una factura.
Puede resultar más difícil resolver conflictos
Puede parecer más arriesgado plantear problemas graves con un amigo que con un desconocido. Tener desacuerdos o vivir con un amigo evasivo puede dar lugar a que uno de los dos quiera mudarse, lo que puede terminar afectando la amistad de forma considerable.
Por eso, cuando se vive con un desconocido, algunas situaciones pueden ser más fáciles de abordar, ya que los dos pueden tener una distancia emocional más saludable entre sí.
Establecerse con extraños puede ser más fácil
La posibilidad de vivir con un amigo puede hacer que pase por alto algunas preocupaciones o que el hecho de establecer límites pueda complicarse.
En cambio, entrevistar a un desconocido como posible compañero de piso puede ser mejor, dado a que se sentirá más inclinado a hacer que tengan relación directa con su comportamiento como compañero de arriendo. Además, ambos pueden comunicar claramente sus límites, ya que no se conocen.
Estas son algunas de las diferencias principales que puede tener elegir un amigo como compañero de arriendo a elegir un extraño, por lo que es recomendable que medite bien los factores que debe considerar entre las dos opciones.
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