Cuando se arrienda un inmueble para que el interesado viva en él a cambio de pagar un canon mensual, se piensa que una vez finalizado el acuerdo contractual, se va a decidir si habrá una renovación de contrato o una prórroga de este, sin embargo, en ocasiones se presentan malos entendidos que hacen que el propietario desista de estas opciones.
Los problemas entre el arrendatario y el arrendador llegan a ser muy comunes, y justamente por ello es que se dan por terminados los contratos de arrendamiento. Con frecuencia, los inconvenientes se relacionan con:
- Problemas en el pago mensual de arriendo.
- Incumplimientos contractuales, por ejemplo, el mal cuidado del inmueble, subarriendos no autorizados, entre otros.
- Cualquier otro motivo que rompa con las cláusulas que se estipularon en el contrato.
Ante la culminación total del contrato, es evidente que el arrendatario debe desalojar el inmueble, dejándolo en óptimas condiciones para poder hacerle la entrega legal del mismo al propietario, pero existen arrendatarios tan problemáticos que se rehúsan a desalojar la propiedad, tanto así, que el arrendador debe acudir al tribunal para solicitar la restitución de la propiedad.
¿De qué trata la restitución de la propiedad?
Se trata de un proceso legal que obliga al arrendatario a irse por completo de la propiedad, pero esto sucede cuando ya el contrato de arrendamiento ha culminado, sea cual sea la razón. Por lo tanto, el juez otorga una orden específica para que se proceda con el desalojo legal y se restituya la propiedad.
¿Cómo comienza el proceso?
- En primera instancia, el arrendador debe anunciar que da por terminado el contrato, y que la persona posee solo tres meses para desalojar. Debe hacerlo de forma anticipada porque así lo exige la Ley 820 de 2003 de Arrendamiento y Vivienda Urbana de Colombia.
- En el momento que llegue el día pautado, el arrendatario tiene que desalojar sin haber inconvenientes de por medio. En caso de que existan y el arrendatario no quiera irse, entonces el propietario tiene que dirigirse al tribunal para explicar su situación.
- En el tribunal el arrendador debe realizar una demanda en contra de la persona para que el juez pueda dar una orden de restitución de propiedad. Claro está, este es un proceso legal riguroso.
- Bajo la normativa del artículo 384, la restitución inmobiliaria exige unas normativas que deben ser cumplidas para poder tramitar la demanda fácilmente.
- La restitución no es solamente válida para las viviendas, sino también locales comerciales o cualquier otro ente que sea alquilado.
¿Cómo demandar para hacer una restitución?
Se debe tener en cuenta que toda demanda procede a partir de las evidencias que se posean. Es por ello que, el arrendador debe incluir cualquier tipo de prueba que tenga para dar inicio a la denuncia.
- Contrato inicial por escrito.
- Anuncio comunicativo para el desalojo con tres meses de anticipación.
- Método testimonial donde se entrevisten a testigos.
- Fotografías, conversaciones digitales donde el arrendatario se niegue a salir de la propiedad, entre otros.
Tanto el arrendador como el arrendatario deben cumplir con las obligaciones legales que exigen las leyes del país. La restitución es un elemento que puede ser evitado si existe de por medio la comunicación y responsabilidad. La actuación de ambas partes durante todo el tiempo de estadía tiene que ser ameno, ético y profesional, de lo contrario, la única solución solo la tendrá un tribunal competente que maneje este tipo de problemáticas.
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