El inadecuado estado en el que pueda estar la propiedad definitivamente afectará la vivencia del arrendatario en el recinto. Aunque este sea un caso bastante común, difícilmente las personas saben cómo accionar y, mucho menos, los derechos que poseen.
Una propiedad en adecuado estado
Cuando se genera un contrato de arrendamiento, el arrendatario debe pagarle una cuota especifica al arrendador, y este último debe ofrecerle y garantizarle una vivienda que sea digna para habitar y gozar, la cual debe mantenerse así durante el tiempo que dure el contrato.
Por lo tanto, si el caso es en donde el arrendador no cumple con su parte y entrega una propiedad en mal estado, el inquilino tiene todo el derecho legal de exigirle que lo arregle, incluso, puede terminar con el contrato si así lo desea.
El arrendador tiene la obligación de entregar y mantener la propiedad en buen estado
Al momento de alquilar un espacio para su disfrute, el inquilino espera contar con un agradable ambiente, en donde se permita habitar adecuadamente, lo que a veces es imposible debido al deterioro de la propiedad. Es por esto que existen leyes que amparan al arrendatario en este tipo de situaciones.
Este es el caso del artículo 1985 del Código Civil, en donde se estipula que el arrendador tiene la responsabilidad y la obligación de mantener el bien que se ha alquilado en un estado adecuado, es decir, hacer todas las reparaciones que sean necesarias para que se mantenga como se entregó. Exceptuando los daños o deterioros que sean responsabilidad del inquilino.
Es importante resaltar que cada contrato puede tener sus adecuaciones, según los acuerdos entre las partes.
En cuanto al artículo 8 de la Ley 820 de 2003 afirma que el arrendador, por obligación, debe conservar cualquier inmueble que haya alquilado, igual que en el arrendamiento de vivienda urbana.
¿Qué dice el contrato?
El Código Civil permite que cada contrato pueda tener sus especificaciones. Es decir, que dependerá de los acuerdos que se generen entre las partes, pueden modificar estas responsabilidades y, si lo dejan por escrito en el contrato, el arrendatario no tendrá derecho a reclamar.
¿Puedo cancelar el contrato?
Definitivamente, cualquier incumplimiento con el contrato es meritorio para cancelarlo, el mal estado del inmueble no es la excepción. El Código Civil, artículo 1990 dice que el arrendatario tiene el derecho a terminar el contrato si el mal estado de la propiedad no le permite hacer uso de ella con normalidad, sin importar si el arrendador conociese o no la forma en cómo estuviera el inmueble; incluso si el deterioro comenzó después del periodo del contrato (sin que sea responsabilidad del arrendatario, claro está).
Por supuesto, al cancelar el contrato por estas razones, el arrendatario no tiene a su cargo ninguna penalización, puesto que no es culpa de él la situación que se pasa.
¿Hay alguna otra solución
En caso de no querer terminar el contrato por esta razón, la ley permite otra alternativa en el artículo 1990 del Código Civil: que se rebaje el precio de la renta. Esta decisión, en realidad, le corresponderá al juez luego de evaluar la situación. Sin embargo, esto no impide que las partes puedan llegar a un acuerdo entre ellas mismas.
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