La confianza y honestidad que se debe tener entre el arrendatario e inquilino es de suma importancia, además de los trámites legales que lleva consigo el arriendo de un inmueble. Los requisitos al momento de arrendar un inmueble son puntuales, y, todos van dirigidos a conocer mejor al futuro inquilino, bien sea en el ámbito financiero o social. Es por ello que existen métodos para verificar si la persona que desea alquilar es conveniente o no.
Dentro de los mismos requerimientos se encuentra uno muy esencial y que no puede faltar: las cartas de recomendación que le exige el arrendador a su arrendatario. Pues se trata de una forma sencilla de conseguir confiabilidad para la construcción de esa nueva relación. Ya que, no se puede tener en casa a un individuo que no tenga buen comportamiento profesional, ético y social, pues serían elementos desfavorables para su selección.
¿Qué es una carta de recomendación y por qué es parte de las exigencias para arrendar un inmueble?
Uno de los aspectos principales cuando se quiere arrendar un inmueble es precisamente conseguir un inquilino que cumpla con todas las responsabilidades posibles, que se interese por mantener el inmueble en buen estado y, también que posea buen comportamiento social. No obstante, para llegar a identificarlo y conocerlo mejor se necesita acceder a ciertos aspectos principales por medio de métodos que puedan consignar la verdad al arrendador.
Una forma sencilla para llegar a ello es mediante una carta de recomendación, pues la misma determina si una persona es responsable o no, y para saber si puede ser confiable.
¿Cuál es la importancia de una carta de recomendación para un arrendamiento?
Su importancia radica en que son documentos de respaldo que adjunta el inquilino hacía el arrendador para demostrar la buena actitud, buen comportamiento y capacidad de responsabilidad para encargarse de un inmueble que no le pertenece. Por lo tanto, la misma tiene que encontrarse muy bien redactada por un ente jerárquico.
Así que:
- Una carta de recomendación permite que el arrendador conozca información adicional del inquilino.
- El arrendador puede determinar si posee ciertas virtudes, tales como la responsabilidad, cuidado, atención, puntualidad en pagos, entre otros.
- Que un futuro inquilino lleve una carta de recomendación demuestra que posee interés en que el propietario sepa quién es y cómo se comporta en el medio social.
¿Qué debe tener una carta de recomendación?
Se debe incluir toda la información que se crea competente para demostrar que la persona es de buenos tratos y crianza.
Por ejemplo:
- Nombre completo del quien realiza la carta de recomendación.
- Datos personales del futuro inquilino.
- Correos electrónicos.
- Número de teléfonos de ambas partes.
- Descripción breve sobre el buen comportamiento y las habilidades del futuro inquilino: puntualidad en pago, responsabilidad, buen comportamiento, educación, entre otros.
Entonces, es recomendable que al momento de querer arrendar una propiedad, se solicite este requisito fundamental para determinar qué tan conveniente es darle la oportunidad al inquilino que se entrevista. La carta de recomendación es como una guía básica para saber si el futuro arrendatario es confiable, así mismo como lo es la carta de finalización de contrato, donde se exponen los motivos por los cuales es necesario dejar el inmueble arrendado.