Durante algunos años se ha reproducido en la cultura popular el uso del término ‘sostenible’, el cual se refiere a algo que puede mantenerse y propagarse por medio de sus propios rasgos y atributos. Y es en la ecología y la economía, donde se encuentra mayormente esta palabra, ya que, hace referencia a procesos de aprovechamiento de los recursos en forma de que estos sigan existiendo en el tiempo.
En el caso de la finca raíz, se viene dando una transformación que busca una dinámica sostenible para disminuir el impacto al medioambiente.
¿En qué consiste el urbanismo sostenible?
El urbanismo sostenible es un proyecto que, en el caso inmobiliario, busca integrar la conciencia ambiental con viviendas dignas, tratando de disminuir el impacto en el cambio climático; empleando metodologías de eficacia energética, construcción de espacios verdes y manejo de residuos. La misión aquí es amortiguar el impacto en el ambiente, a través de la disminución de gases de invernadero y de una concientización masiva que permita un cambio de nuestra relación con el medio ambiente.
¿Qué debe procurar un urbanismo sostenible?
1. Sostenibilidad ambiental
Es necesario que el urbanismo evite causar algún impacto sobre el suelo y medio ambiente circundante, tener una práctica de consumo de recursos y energía eficientes para eventualmente disminuir los niveles de residuos y niveles de CO2.
2. Sostenibilidad económica
Si el proyecto no tiene una estabilidad económica por sí mismo, puede poner en peligro los recursos de la población y el lugar, ya que los mismos son perecederos. Es menester que sean renovables.
3. Sostenibilidad social
El proyecto debe ser consciente con la población que habita el urbanismo, así su objetivo es mejorar la calidad de vida y cuidar los recursos que provee el espacio, y para ello la población debe ser también partícipe al adquirir hábitos conscientes con el entorno más allá de las viviendas.
Ciudades de urbanismo sostenible
El urbanismo se hace importante porque puede proveer la infraestructura que cohesione todas las aristas de este proyecto. Las ciudades deben hacer posible tener edificios que permitan la convivencia de personas en total sintonía sin perjudicar el medio ambiente.
Por eso, lo que se necesita es reconocer los problemas específicos de la comunidad y otorgarles una solución. Lo que se traduce en mejores construcciones e infraestructura, aplicar tecnología para energía renovable. Que haya un compromiso también al financiar y proveer la tecnología y herramientas que mantendrán a las estructuras con capacidad de ser autosuficientes.
Si la mentalidad de las empresas, el estado y la población se direcciona en poder cuidar el planeta y a nosotros mismos en el proceso, será posible tener un urbanismo funcional y productivo tanto económica como ecológicamente.
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