Un contrato de arrendamiento es, sin duda, uno de los documentos a los que hay que prestar mucha atención pues siendo un acuerdo legal entre dos personas sobre una propiedad, es algo que merece todo el cuidado.
Al igual que otros tipos de contratos y documentos legales, los contratos de alquiler a veces pueden ser difíciles de entender, puesto que poseen múltiples detalles que requieren atención y que de no ser tomados en cuenta a tiempo, pueden acarrear disputas en el futuro.
Por fortuna, con los siguientes datos prácticos usted podrá entender las partes más importantes que conforman un contrato de arriendo, ya sea que esté buscando alquilar o si ya se encuentra comprometido con uno.
Identifique a las partes involucradas
El principio del contrato del alquiler identificará las partes involucradas. Esté atento a nombres de la empresa inmobiliaria o el propietario directo, las direcciones, una descripción del inmueble a alquilar y sus datos como inquilino.
Así mismo, verifique que toda su información esté correcta y guarde los datos de la empresa de gestión y/o propietario del inmueble para cuando sea necesario contactarlos o hacer algún trámite durante el proceso.
Esté atento a las cláusulas del contrato y detalles del arriendo
Una de las cosas que deben aparecer claramente en su contrato, es el plazo de arrendamiento, el cual variará según el tipo de contrato elegido. Esto dirá exactamente cuánto tiempo se compromete a permanecer en la vivienda.
También, esté atento a las cláusulas del contrato ya que, romper un contrato de alquiler suele ser un proceso costoso. Se vuelve fundamental, saber exactamente por cuánto tiempo se firma y qué ocurre si se va antes de tiempo.
Los detalles del alquiler, le permitirán saber con exactitud la renta mensual, la fecha de corte y la forma en la que será entregado el pago, ya sea vía electrónica o en efectivo.
Hacer constar cualquier pago extra
Tomar nota del monto total de su depósito de seguridad le ayudará a tener un control sobre la propiedad que está alquilando.
A su vez, otros elementos que deben ser señalados son: pago por mascotas, casos de atrasos con el pago, servicios públicos incluidos en la renta y/o los que exigen seguro de inquilino.
Así que, al remarcar todos esos posibles pagos extras, usted podrá tener una idea más clara de todo lo que necesita invertir para poder vivir en su nuevo hogar.
Normas y restricciones
Cada propietario o arrendador tiene sus normas y restricciones para su inmueble. Estas pueden ser restricciones a las mascotas (la prohibición de ciertas razas o tamaños) modificaciones al inmueble (pintar o poner clavos en las paredes) y, las actividades que puede realizar dentro la vivienda (fumar, organizar fiestas, entre otros.).
Ante esto, se recomienda analizar muy bien cada una de las restricciones que se exigen dentro del contrato de arrendamiento. Todo esto para evitar tomar una decisión incorrecta, infringir cláusulas obligatorias, pagar multa o ser expulsado del inmueble por incumplimiento.
Últimos detalles y aspectos varios
Existen detalles que muchas veces pasan desapercibidos y que son clave para tener una convivencia sana y clara. Cerciórese de cuál es el derecho de entrada de su arrendador. Ya que en algunos momentos es probable que este necesite acceder al inmueble por alguna razón de mantenimiento.
Por lo general, éste deberá avisarle con algunos días o semanas de antelación para que pueda estar usted allí, mientras se realiza la reparación o chequeo. Otro detalle, es el de asegurarse de tener una copia de su contrato de alquiler para poder consultarlo si se le olvida o necesita aclarar algo.
Con esta guía breve sobre los contratos de arriendo usted tendrá al alcance de su mano toda la información que necesita a la hora de firmar un acuerdo. De modo que sepa a qué está accediendo exactamente y que pueda tomar la mejor decisión para usted y su familia.