Los contratos de arrendamiento son elementos esenciales al momento de concretar el negocio, pues el mismo es el que validará las condiciones, responsabilidades, y términos que se exponen de forma consensuada entre ambas partes. Por lo tanto, existen dos tipos de contratos, los verbales que no son recomendados por su falta de confiabilidad y, los escritos que son los más comunes por la validez legal que poseen ante los tribunales o cualquier otra instancia gubernamental.
Es por ello que, al realizar un contrato de arrendamiento se debe tener al lado un abogado que guíe y explique qué es lo que se encuentra viable legalmente y qué no, dentro de las condiciones. Pues, es muy común leer documentos legales con cláusulas ilegales, y, por falta de conocimiento no se saben identificar.
¿Por qué un contrato de arrendamiento?
Un contrato es un documento legal que responsabiliza a ambas partes a cumplir con las obligaciones y deberes que les competen. Es por ello que, en medio de un arrendamiento no puede faltar un documento contractual que certifique y valide el consenso de las cláusulas descritas. Así, en dado caso de que suceda algún tipo de inconveniente, se podrá defender los derechos ante las autoridades a partir del contrato firmado por ambas personas responsables.
¿Pueden existir cláusulas abusivas?
Sí. Por ello, se recomienda conocer cuáles son los derechos y deberes tanto del inquilino como del arrendador. Así que, nunca está demás leer y profundizar sobre las leyes básicas de arriendo, tales como la Ley 820 de 2003 y el Código Civil de Colombia para determinar qué debe tener un contrato legalmente.
Ahora bien, algunos contratos de alquiler, cuando se analizan, resultan tener condiciones abusivas que generan una completa desigualdad entre el inquilino y arrendador ignorando las obligaciones y deberes que se deben tener.
Casi siempre, este tipo de documento legal es redactado por los propietarios del inmueble. Ya que, son ellos quienes prestan un servicio. Sin embargo, no puede existir un poder ante la figura del arrendatario, ya que, ambos necesitan poseer cláusulas que igualen sus derechos.
¿Cuáles son las cláusulas ilegales más comunes?
- Temporalidad contractual menor de un año: según las normativas de arrendamiento, es decir, la Ley 820 de 2003 afirma que todo inquilino y arrendador pueden crear una relación con un tiempo mínimo de seis meses. Así que, si en la cláusula dice que a partir de un año, se considera ilegal por ir en contra de lo postulado en la ley.
- Avisar sobre la culminación del contrato o desalojo del inmueble en un tiempo de 1 mes. Se dice que el tiempo mínimo del aviso anticipado es de tres meses.
- Obligar a cancelar la renta días antes de la fecha establecida. Es por ello que se requiere colocar resaltada la misma en el contrato.
- Cancelar mensualidades adicionales. Esta acción es ilegal, pues en el Código Civil se afirma que no se puede pedir meses por adelantado.