Debe saber que los suelos laminados tienen requisitos específicos en cuanto a su cuidado, debido a que no soportan el exceso de humedad, por lo que siempre es importante la elección de los productos de limpieza adecuados para el mantenimiento de este tipo de suelos.
Los profesionales, suelen recomendar que nunca deben pulir o encerar este tipo de suelos, ya que sólo terminará dejando un residuo opaco. Además, la humedad puede introducirse entre las tablas y ser absorbida por el tablero de fibras, lo que sólo terminaría provocando hinchazones, perjudicando el estado del suelo.
Pero no tiene que preocuparse, ya que mantener y limpiar este tipo de suelos no es tan complicado como puede parecerle.
Limpie de forma regular
Cuando se trata de un mantenimiento regular, los suelos laminados requieren algunos productos de limpieza. Y algunos de ellos incluyen ingredientes domésticos habituales. En general, se aconseja limpiar los suelos una o dos veces por semana para mantenerlos. Y también debería limpiarlos en profundidad una vez al mes.
Para la limpieza regular, utilice un cepillo suave y una aspiradora, o barra ligeramente los suelos con una mopa. Evite utilizar escobas con cerdas duras, ya que pueden destruir la superficie de sus suelos. Recuerde que los residuos y la suciedad se depositan en las ranuras. Por lo tanto, asegúrese de aspirar o barrer siguiendo estas líneas.
Implemente el uso de vinagre y agua caliente
Una gran opción de limpieza para este tipo de suelos es el agua caliente, ya que no deja marcas al secarse. Debe remojar y escurrir el exceso de agua de su fregadora y luego deslizarla por el suelo. Si no tiene limpiador comercial para laminados, el vinagre en un tobo de agua caliente o tibia es una gran alternativa, ya que no producirá daños a los suelos de su hogar.
Limpie siempre los derrames de forma rápida
Una de las mejores maneras de mantener su suelo laminado libre de manchas y suciedad es actuar rápidamente cuando ocurre algo fuera de lo normal, por lo que es importante que se encargue de un derrame de forma rápida siempre que estos se produzcan.
Los derrames de líquidos deben limpiarse implementando el uso de un paño seco. Recuerde siempre limpiar las migas y la suciedad aspirando o barriendo, para luego utilizar un paño húmedo o mojado para limpiar la superficie después de recoger los trozos grandes del suelo. Y, posteriormente, recuerde limpiar siempre con un producto de limpieza comercial o doméstico que no dañe a su suelo laminado.
Consejos extra
Posicione alfombras de forma estratégica, como en la entrada de su hogar o la del jardín, ya que estas funcionarán para recoger la humedad, los aceites y la suciedad, y así evitar que entren a la casa.
Barra regularmente con una escoba de cerdas suaves y utilice una aspiradora para eliminar el pelo de su mascota (si tiene en casa), la suciedad y el exceso de polvo.
También puede instalar cubiertas para las ventanas, ya que estas ayudan a reducir los efectos de la luz solar en sus efectos laminados, añadiéndoles mayor tiempo de vida útil.
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